Puedo decirte que mi llegada a Barcelona no fue muy afortunada. Porque no más llegar mi madre me bañó, antes de bajar a tierra. Me vistió con mis ropitas veraniegas (acordes con el clima cálido de Venezuela) y me resfrié (Ese mes de mayo Barcelona todavía estaba muy fría y húmeda) Resfriado que no me abandonó en todos los años siguientes (por el resfrío perdí el apetito, tosía mucho y al no comer, mi debilidad no me permitía reponerme. Tuve viruela "borda" y me dió bronquitis). Mis pobres padres y mis tios y tias sufrían conmigo lo indecible. En el piso de la calle Consejo de Ciento vivían mis tias Juanita, Ramona, tio Santiago y tío José. Mi tía Marta estudiaba en un internado en Palma de Mallorca. En el intento de mejorar mis vías respiratorias me operaron de las amigdalas y adenoides. Por mi condición asmática no me pusieron anestesia. Así es que, aunque todo fue rápido (para mi, eterno) sufrí tanto que a pesar de los 76 años transcurridos todavia me acuerdo.
Fotografia: Eduardo Carmona de Paco en la boda de Ramona Carmona Obrador y Pedro Bordoy
